En la ciudad de Valencia se ha realizado la presentación española de la nueva entrega cinematográfica de James Bond. Quién le iba a decir al agente 007 actual, al guapísimo y escultural actor británico Daniel Craig que le iban a poner la alfombra roja para pisar el suelo aquí y allá cuando se pasó años duchándose y afeitándose en el gimnasio en el que moldeaba su escultural cuerpo y tenía que dormir en su coche porque no tenía dinero suficiente para pagar una mísera pensión. Esto es el arte. "Helarte" de frío. Este fin de semana se estrena en España la nueva película del director Ridley Scott. Su actor fetiche, el neozelandés Russell Crowe y el auténtico Leonardo DiCaprio son los protagonistas de la película "Red de mentiras". Leonardo DiCaprio es un actor que me encanta porque me parece muy buen actor, me parece un excelente profesional. En su vida personal también me encanta: es un tipo que está pasadísimo pero muy bien instruido, y, con las mujeres no se corta un pelo. Folla con las más guapas y cuando le empiezan a dar la tabarra les dice: Mira bonita, te vas con tu puta madre porque a mi por amor los calzoncillos me los lavan mi madre y mi abuela sin querer nada a cambio. Para expresarse de este modo hay que tener dos cojones y Leo los tiene. ¡Vivan los cojones de Leonardo DiCaprio! Leo es un hombre al que sigo lo más de cerca posible que puedo porque me encanta su actitud.
En la ciudad de Madrid el Foro de las Ciencias Ocultas y Espirituales está celebrando su vigésimo cuarta edición. Los videntes están saturados de trabajo porque las personas acuden con fe ciega a ellos con ansiedad para tratar de saber algo acerca de estabilidad laboral. Hoy en el trabajo he mantenido una pequeña conversación con un señor mayor, de los que la esposa de su hijo echa por las mañanas de casa porque estorba porque la hija de la gran puta tiene que limpiar la casa y el señor estorba. El propio señor me ha dicho que cree que las nuevas tecnologías; teléfonos móviles, pantallas planas, Mp3 y Mp4 y, en especial los ordenadores, cree que están cargados por el diablo. Le he dicho que no, que no es cierto que estos aparatos estén cargados por el diablo. El hombre me ha dicho que en su juventud los jóvenes no estaban tan agilipollados como lo estamos ahora y que con muchos menos medios lo pasaban bien porque en cada pueblo había y sigue habiendo un tontito y una prostituta. Antes de marcharse a tomar un chato de vino el hombre me ha dicho: joven, usted no olvide lo que le acabo de decir. No lo olvido.
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