El pasado viernes por la noche revisé por tercera vez la película argentina "El hijo de la novia". Esta película es una gran película. El guión, la dirección cinematográfica y el enfoque que da al proyecto el señor Juan José Campanella son estupendos. "El hijo de la novia" es una película divertida, alegre y sensible a más no poder con grandes toques de humor rápido. La película retrata la vida de un hombre divorciado, que mantiene una relación no muy buena con su ex mujer debido a que apenas tiene tiempo para ver a la hija que tienen en común. El protagonista es el actor argentino Ricardo Darín que, con esta película alcanzó la fama internacional de manera merecida. En esta película el personaje que interpreta Ricardo Darín vive en exclusiva para sacar adelante un negocio propio. Mantiene una relación sentimental con una mujer joven que intepreta la actriz Natalia Verbeke, que en esta película está guapísima y cuando vino a España a hacer cine y televisión no sé los motivos pero ha empeorado mucho. Los otros dos actores que conforman el reparto son Héctor Alterio y la excelente Norma Aleandro. La historia de estos dos personajes es excelente y febril. Una historia de amor tierna entre dos viejitos sin paragón. El personaje de Norma Aleandro es el de una mujer mayor que sufre Alzheimer. Vive internada en un psiquiátrico. El hombre de su vida, que nunca se casó con ella ahora quiere casarse para hacerle feliz cuarenta y cuatro años después de una vida en común. El hombre venera a su esposa incluso enferma. Esto sí que es amor. El hijo de la pareja es Ricardo Darín y, cuando su padre le dice lo pretende hacer no le gusta. Ricardo Darín sigue muy ocupado con el restaurante. Tan ocupado que le pega un telele por el que tiene que ingresar en el hospital. Me encanta cuando despierta en el hospital y le dice a su novia que tiene un sueño y que el sueño consiste en irse a la mierda. ¿No han tenido ustedes nunca ésa sensación? Por semana la suelo tener cuatro o cinco veces. Su novia se da cuenta que en su vida no hay sitio y, terminan por dejarlo. Cuando sale del hospital el personaje masculino se replantea la vida. Decide vender el restaurante. Decide ayudar a su padre a llevar su proyecto adelante. Decide regresar con su novia y monta otro restaurante. Como la Iglesia católica no otorga permiso a los viejitos para casarse debido a la enfermedad que padece la novia, el hijo de la novia monta una boda falsa aunque para sus padres es el esplendor. "El hijo de la novia" es una película muy sensible y agradable. Muy recomendable.
domingo, 6 de julio de 2008
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